Y esta la seguridad jurídica de la que disfrutamos los españoles:
- Una pareja se va de vacaciones
- Al regresar se encuentran que unos golfos han okupado su casa y han cambiado las cerraduras
- Se tienen que ir a vivir a casa de un hijo
- El juez que inicialmente había ordenado el deshaucio y devolución de la casa a sus legítimos ocupantes, cancela dicho auto y pone una fianza de 1 euro a los okupas
- Para mayor inri, la pareja “des-okupada” tiene que seguir pagando el alquiler de la casa para no perder los derechos al tratarse de una casa de protección oficial.